Simulación, metamorfosis y espejos en la novela Coraline
Rose Guerrero Roca
15 de abril de 2024
Fuente: https://wallpaperset.com/coraline-wallpaper#google_vignette
En esta gran novela de fantasía oscura, el autor Neil Gaiman aborda la historia de Coraline Jones, una pequeña joven con un espíritu aventurero que se muda con su familia al complejo de departamentos Pink Palace (Palacio Rosa).
Coraline suele aburrirse en casa debido a que sus padres siempre están ocupados trabajando y no le dedican mucho tiempo de calidad a ella, por lo que Coraline visita a sus vecinos. La señorita Spink y la señorita Forcible, actrices retiradas que viven juntas con sus perros en el piso de abajo, leen las hojas de té de Coraline y le advierten de un inminente peligro y en otra ocasión le entregan una piedra con un hueco en el medio, la cual podría servirle como protección y para encontrar objetos perdidos. Por otra parte, el señor Bobo, referido en la película como Bobinsky o señor B, quien vive en el departamento de arriba, le entrega un mensaje a Coraline por parte de sus ratones. Ellos le advertían que no entrara por la puerta secreta. Dicha puerta, hallada por Coraline dentro de su departamento, solo mostraba una pared de ladrillos al abrirse. Un día, ella abrió la puerta, encontrándose con un camino oscuro que, al cruzarlo, lleva a Coraline al Otro mundo, donde se encontraba la Otra madre, una persona similar a la madre real de Coraline. Sin embargo, la Otra madre tiene la piel muy pálida, blanca, luce más delgada y tiene ojos de botón. Ella se encargará de prepararle comida deliciosa y darle una mejor habitación y juguetes nuevos e increíbles, ya que se mueven por su cuenta. Además, sus vecinos parecen ser más agradables en ese Otro mundo. Todo ahí parece ser mejor, hasta que la Otra madre le propone coserle botones en los ojos a Coraline, requisito para quedarse para siempre en ese mundo. Desde ese momento, Coraline, con ayuda de un gato, tendrá que llenarse de valentía para poder enfrentar a su Otra madre y escapar de ese mundo.
Simulación
La idea de un mundo simulado se vuelve evidente cuando Coraline pensaba que, luego de cruzar la puerta secreta, había regresado a su sala, como si ella siguiera en su misma realidad. El gato que Coraline encontró durante su exploración en los alrededores del Pink Palace (en su mundo real) había logrado cruzar a ese Otro mundo y, más adelante, le explica a Coraline que quizá ese lugar lo encontró la Otra madre o lo pudo haber creado, pero que el propósito de la Otra madre era no dejarla escapar, luego del rechazo de Coraline a la propuesta de que le cosieran botones en los ojos. Si recordamos la impresión que las maravillas de ese Otro mundo dejaron en Coraline, podemos pensar que la Otra madre las había creado para convencer a Coraline de que ese Otro mundo era mucho mejor y que debía quedarse con ella y con su Otro padre para siempre. Incluso la habitación de Coraline, que parecía ser la misma, lucía más llamativa con colores verde y rosado, contaba con mejores juguetes y tenía una mejor vista de los alrededores.
Sin embargo, cuando Coraline rechaza la propuesta y desea irse de ese Otro mundo, la Otra madre ya no necesita continuar con ese mundo simulado. Poco a poco se ve cómo ese Otro mundo empieza a distorsionarse debido al enojo de la Otra madre al no lograr su propósito aún. Coraline con el gato caminan por el bosque para terminar de vuelta en los alrededores del Pink Palace, dando a entender que ese mundo era muy pequeño y que la Otra madre se enfocó en crear cosas que a Coraline le gustaría. Más adelante, cuando Coraline reta a la Otra madre a un juego (si ganaba Coraline, podría irse de ahí), los alrededores, los vecinos y los objetos empiezan a cambiar físicamente y Coraline entiende que ninguna maravilla era verdaderamente real, sino algo simulado que la Otra madre creaba, mejoraba o distorsionaba a su antojo. La casa empieza a retorcerse, los árboles parecen bocetos, el mundo exterior parece presentar remolinos. Todo empieza a distorsionarse, porque la simulación ya no es útil.
Metamorfosis
Un ejemplo muy claro de metamorfosis es el momento en que Coraline, en el Otro mundo, baja para visitar a las señoritas Spink y Forcible. Al ingresar y ser guiada por un perro que revisaba las entradas, Coraline se encuentra con un teatro increíble, cuyas butacas estaban ocupadas por otros perros. En el performance de las señoritas Spink y Forcible, ambas, que aún lucían como en la realidad de Coraline (adultas mayores de contextura gruesa), empezaron a quitarse los abrigos. Sin embargo, al hacerlo, también sus rostros se abren, como si se retiraran algún traje. Ambas ahora lucen cuerpos esbeltos y jóvenes de bellas acróbatas como si hubieran pasado a convertirse en mariposas al deshacerse de sus viejos cuerpos. Por otra parte, ellas mismas, durante el juego de Coraline y la Otra madre, terminan transformadas en un ser de textura pegajosa y apariencia extraña debido a que sus cuerpos se combinan y entrelazan.
Considero importante resaltar la metamorfosis que presenta la Otra madre de una manera increíble en la película Coraline y la puerta secreta, ya que desde un inicio es mostrada como una versión mejorada de la mamá real de Coraline, usando maquillaje y luciendo más bella hasta que la “rebeldía” de Coraline por querer irse y no aceptarla como su verdadera madre hace que la Otra madre empiece a cambiar drásticamente. Se vuelve más delgada, su cuello se alarga y luce más aterradora. Después, es notorio su esqueleto metálico hasta terminar casi convertida en una especie de araña. Mientras tanto, en la novela, la Otra madre tiene un aspecto que inquieta a Coraline desde el principio por sus manos y dedos tan delgados y largos que llegan a ser comparados con arañas (miedo de Coraline). Su cuello se alarga y su postura se vuelve más erguida, pero lo que le parece más inquietante y extraño a Coraline es cuando los cabellos de la Otra madre empiezan a moverse pese a la ausencia de viento, como si se tratase de serpientes.
Espejos
Mientras que los espejos pueden representar un reflejo o visión de la realidad, en la novela se usan con tres propósitos distintos.
Primero, para reflejar la amenaza o las consecuencias por el rechazo a la propuesta de la Otra madre. Después de la repentina desaparición de los verdaderos padres de Coraline luego de su regreso del Otro mundo, el gato despierta a Coraline y la guía hacia el espejo de cuerpo entero que está al fondo de un pasillo de su departamento en la realidad. En el reflejo, se encuentran sus padres, aparentemente perdidos y tristes sin poder escapar. No pueden hablar con ella, solo escribir en el espejo para pedirle ayuda a su hija. Con ello, se muestra una forma de burla por parte de la Otra madre hacia Coraline por no aceptar su propuesta, así como una forma de hacerle entender que debe volver al Otro mundo.
Segundo, como una forma de engaño y chantaje. Cuando Coraline regresa al Otro mundo para recuperar a sus verdaderos padres, es recibida por la Otra madre. Coraline la acusa de secuestrar a sus padres, pero la Otra madre la acerca a un espejo y le muestra a través del reflejo a sus padres llegando de vacaciones a casa, felices por no tener que estar con Coraline y aliviados por el hecho de que su hija pueda ser cuidada por la Otra madre. Sin embargo, Coraline ve a través de la mentira, no dejándose engañar.
Tercero, como un encierro/castigo temporal para Coraline por su “rebeldía” y no aceptar a la Otra madre y como una especie de prisión para los niños fantasma. La Otra madre usa una llave, la cual coloca y mueve dentro del espejo, abriendo una puerta. Empuja a Coraline y la retiene ahí. Coraline se encuentra con tres niños fantasma, quienes fueron víctimas anteriores de la Otra madre que sí dejaron que ella les cosiera botones en los ojos. Sin embargo, ella terminó alimentándose de ellos, de sus vidas, dejándolos encerrados ahí.
De una forma tan creativa e impresionante, Neil Gaiman retrata la historia de Coraline, quien debe enfrentarse a las apariencias de lo que hubiera sido una “vida hermosa/plena” o “mejor que su realidad” para entender los engaños ocultos de la Otra madre y luchar para liberarse por fin de aquella amenaza, salvando a otros en el proceso.