La danza de Llamerada puneña es declarada Patrimonio Cultural de la Nación y Bolivia denuncia a Perú ante la UNESCO

La Llamerada ha sido declarada como patrimonio cultural en el Perú.  [Foto: Andina.]

Este año 2024, el Ministerio de Cultura, a través de la Resolución Viceministerial N.º 000032-2024-VMPCIC/MC declaró Patrimonio Cultural de la Nación a la danza Llamerada puneña. Esto ha generado un fuerte orgullo entre las comunidades que se encuentran en la zona, asimismo, este reconocimiento oficial, por parte del Gobierno de Perú, es una forma de cuidar, tratar de preservar y sobre todo dar una mayor visibilidad a la tradición puneña que destaca la importancia de la historia y costumbres. Además, esta danza, a lo largo de los años, ha sido presentada en diversas festividades, especialmente durante la fiesta de la Candelaria en Puno que comienza cada 2 de febrero y que fue declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO en 2014. 

Sin embargo, esta medida ha ocasionado una serie de controversias con nuestro país vecino Bolivia. Incluso se presiente una disputa internacional por el Patrimonio de la Sierra. ¿Pero por qué surge todo esto?

Para la Organización Boliviana de Defensa y Difusión del Folklore (Obdefolk), Perú estaría usando danzas que son propias y originales de ellos. Es por eso que Bolivia llevó esta problemática con la UNESCO, argumentando que este baile, reconocido como patrimonio de Bolivia hace más de diez años, no debe ser presentado por otra nación como propio. De esta manera, también afirman que las danzas de la Diablada, la Morenada y la Llamerada están siendo erróneamente atribuidas a la cultura peruana. Cabe reflexionar en este punto, que tanto como Perú y Bolivia poseen un pasado histórico, compartido y enriquecedor, y que las actividades culturales deben ser un espacio donde se manifiesta el arte y la cultura uniendo pueblos entre sí, y no dividiendo a la población. 

La diablada puneña fue declarada Patrimonio Cultural de la Nación [Foto: República]

Ahora bien, resulta decir, que no es el primer problema parecido que lidiamos con Bolivia. En el 2021, Perú recibió otra denuncia donde se indicaba que los ciudadanos de Puno usaban danzas bolivianas para realizar actividades culturales. Asimismo, se reclamaba que las danzas de la Morenada, Rey Moreno y Rey Caporal eran propiamente del Carnaval Folclórico de Oruro. Es evidente que este conflicto se ha vuelto a repetir. En dicha línea, esta especie de competencia de a quién le pertenece y a quien no la actividad cultural refleja una falta de diálogo entre ambos países. De igual modo, esta situación revela la carencia del respeto mutuo para enriquecer la diversidad cultural y reconocer el patrimonio cultural de cada país; ya que al final el beneficio termina siendo para ambos.

Para finalizar, la UNESCO no aceptó la queja por las danzas por parte de Bolivia y le dio la razón a Puno y al Perú. Se afirmó que no hubo apropiación en ningún momento de ninguna danza boliviana, y más bien estas danzas comparten un origen mutuo y no hay motivo para generar conflictos entre las comunidades. Entonces, la Llamerada, como las otras danzas, no solo tratan de unir comunidades, sino que también de fortalecer los lazos entre ambos países al resaltar una herencia común. Los bailes regionales representan el trabajo de los llameros, lo cual crea un sentido de responsabilidad compartida y un papel unificador, tanto como para los locales como entre los países.